La vivienda, con una superficie de 276 metros cuadrados, se caracteriza por un diseño contemporáneo y práctico, diseñado para garantizar el máximo confort y calidad de vida. Consta de tres espaciosos dormitorios y tres baños completos, proporcionando un ambiente privado y acogedor que es ideal tanto para familias como para aquellos que deseen hospedar a invitados con privacidad y comodidad. El salón, espacioso y lleno de luz, junto con el comedor adyacente, se erige como el espacio ideal para el ocio y el descanso. Esta propiedad se distingue también por sus vistas despejadas hacia la iglesia de Diego de León y por ofrecer comodidades excepcionales, como un garaje privado en el edificio y múltiples ascensores, incluyendo un montacargas. La exclusividad se ve reforzada al contar con solo dos vecinos por planta, garantizando privacidad e intimidad, perfecto para aquellos que buscan un estilo de vida refinado en el centro de Madrid. Leer más